lunes, 28 de febrero de 2011

Abrazando a la luna *

Así se consumió mi noche. como se consume el hielo, lentamente y con frío paso la noche en desvelo, por el adiós de un posible florecer.Entre sorbos de café y cigarrillos..mirando la noche, mirando esa luna que siempre fue testigo; nuestro  testigo.
A ratos pensaba pobre luna...siempre cómplice de los amores correspondidos y de los que no, de  lágrimas, de  suspiros, de  hechizos, de  anhelos, de belleza, de bienvenidas a este mundo, de  enojos, de  alegrías, de reconciliaciones,  de  adiós sin retorno, de  inquietudes , de  miedos, de  sonrisas, de  lágrimas. Pobre luna ; culpable inspiradora de poetas que hablan de amor, de decepción, o de dolor, que se inspiran bajo su luz . Maravillosa luna inspiradora de las más sublimes declaraciones de amor, peticiones de ilusión; musa de escritores bendecidos por Dios, que saben plasmar las emociones como si él mismo  dictara la prosa, guiando su pluma.
Yo quise culparla por todo y por nada, por  inspirarme y no...al final terminé agradeciéndole que bajo su manto no viste deslizar mis lágrimas ; agradeciéndole que bajo su manto pude ver un hilo de brillo recorrer tu mejilla , ilusa tal vez de que te causaba  tristeza partir por distinto camino cuando  dijimos adiós.